COLECCIÓN#1 DE LA ABUELA DEL APOCALIPSIS

Advierto al lector: Esta una colección incompleta (2016 -...) de 'post' en Facebook de Violeta Ospina realizados en su 'timeline', fielmente recogidos por su editor de cabecera: Leonato Povis. La colección solamente pretende llegar a algún editor novato y crédulo que quiera o desee algún día darle soporte a las palabras de esta abuela enloquecida. El primer 'post' fue escrito en 2016 desde Barcelona, a raíz de los resultados de la votación del Plebiscito en Colombia que preguntaba a los ciudadanos SI estaban de acuerdo o NO con que las FARC, la guerrilla más antigua de Colombia, firmara un acuerdo de paz con el Gobierno. La frustración del NO despertó la ira de la ABUELA DEL APOCALIPSIS que no puede parar de ver en la distancia a Colombia y lo que pueda representar esta palabra.

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Hoy le dicen Unión Nacional, ayer era Frente Nacional, y entonces reaccionaron sectores al margen que no se sentían representados creando, entre otros, el M-19, y con la única salida que las armas... No soy historiadora pero veo círculos y espirales en este relato de las Colombias... DIGO: Hoy podemos reiniciar el círculo sin armas. Si el proceso de paz con las FARC necesita un mártir de rabo de paja que ponga medio país del lado de los acuerdos, adelante, que siga el juego político, porque la paz no tendrá un solo nombre, será en nombre de miles de nombres, o de tantos sin nombre, de los N.N, de las fosas comúnes... y por su puesto de los sobrevivientes, de los que siguen caminando, con su propia voz, con su propia representación. 

• CONJURO 1.0: Que Rabo de Paja se apropie de los acuerdos, los firme, los renombre y los legitime frente a la otra mitad imberbe... que comience el proceso y que apenas se descuide, quede desnudo con todo su séquito a escuchar el latigazo de la Corte Internacional. Presionaremos. Presionaremos. Presionaremos.  Atentamente: La abuela del Apocalipsis.

• CONJURO 2.0 de la Abuela del Apocalipsis: El día pactado se reunirán el zorro y la serpiente. Uno intentará morder al otro en la cola.  

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• CONJURO 3.0 de la Abuela del Apocalipsis. Nobel AWÁ: Que el presidente se despierte en la noche y se mire en el espejo. Que se refleje con 16 años menos, con menos canas, menos ojeras y menos muertos encima. Que en el hombro derecho sienta la mano de Uribe hasta que logre desaparecerla. Que en el hombro derecho sienta cada una de las manos de coroneles y generales que comandaba. Que mire bien el reflejo de sus ojos por dentro, que vea el río desbodándose en ellos, que vea el grupo de cuerpos y que se lance a recoger el de un indígena Awá... Que despierte y entregue (o entierre) el Nobel de la Paz. La abuela perdona pero no olvida. 

• CONJURO 4.0 de la Abuela del Apocalipsis. La ley de los medios y los miedos: Presionar hacia dentro el dedo que oculta el sol, hasta que el enjambre del miedo se divida en dos. El enjambre que concentre y exponga más el miedo tendrá el mayor número de visitas en Youtube y un mayor número de votos en el referéndum por la paz en Colombia. 

Imagen: Jorge Peñuela

• CONJURO 6.0 de la Abuela del Apocalipsis: Que el Arte con mayúscula no compita con la vida. Que la vida resuene en los ausentes y los vivos ausentes. Que la reconciliación de un país encuentre en el anonimato de millones una acción digna de un anti-monumento. Que el anti-monumento convoque a los ausentes con nombre y sin nombre. Después de Doris, por un arte N.N.

LA ABUELA DEL APOCALIPSIS ENTRA A UN GRUPO DE "COLABORACIÓN" DE ALTA ALCURNIA Y ALGO MUY OBVIO PASA...

El tema de las criadas en Colombia y otras capitales de Latinoamérica es largo... una sociedad donde el trabajo doméstico es tan barato tiene un vacío y una distancia de clases muy difícil de llenar. No es obvio y no deja de alarmarme. Todo este cuento es para saltar a otro cuento y es que ¡ojo y oído con las palabras!; con el uso y el abuso de las las formas de relación/resistencia de las comunidades, con palabras claves como empoderamiento, proximidad y redes colaborativas de trabajo, palabras que siguen siendo susceptibles de ser fusiladas y manipuladas. Mientras me echan del grupo este seguiré como LA POLICÍA DE LAS PALABRAS, LA ABUELA DEL APOCALIPSIS, INMAMABLE Y OBVIA señalando el desplume. Y ahora el conjuro...

Un día gracias a la invitación de la madre de un amigo me doy cuenta que hago parte de un numeroso grupo secreto de mujeres en Facebook, una red de trabajo y de colaboración de mujeres en Bogotá. Me emociono, pienso vender algo, comprar algo, apoyar. Luego me sorprende el nombre del grupo: parece como de marca de shampoo japonés o marca de cosmético. Es el grupo ______ "en español", lo que quiere decir que el grupo es la versión de otro grupo que tuvo renombre en otro idioma, seguramente en inglés, pero bueno, no me interesa investigarlo (algunas de mis colegas tal vez sepan de qué grupo estoy hablando). 

Veo rápidamente que la mayoría de las mujeres que publican en el muro venden productos hechos en casa, de belleza, de moda y de cosmética. Más tarde veo que jóvenes promesas intentan vender sus diseños; entonces me vuelvo a ilusionar y tengo el deseo de publicar. Luego veo cómo otras tantas hacen promoción de sus pequeños negocios o restaurantes en zonas más o menos prestigiosas de la ciudad. Me doy cuenta que la mayoría parecen o demuestran tener un status social alto y que como público parecen tener un gusto bien definido que corresponde a valores como "belleza - emprendimiento - ser adulta - ser femenina - tener seguridad - ser buena"... y entonces me desanimo: ¿qué tengo que ver yo con este tipo de valores de mujer para ofrecer o demandar algo? En el grupo hay unas reglas muy claras para publicar: desde cómo usar el correcto 'hashtag' hasta cómo no discriminar por raza, género y clase social. De repente me siento como agente discriminador porque juzgo de manera general a un grupo de mujeres por ser parte de una clase social. Desde la administración Invitan a todas las que quieran publicar que se comprometan a presentar su trabajo de manera elocuente y bueno, esto parece que funciona muy bien en términos de "marketing" o por lo menos de "likes".

Total que al final me aburro y olvido cualquier deseo de publicar... Poco después me llega una notificación de venta de arepas de huevo. Las arepas de huevo son típicas de la Costa Atlántica y pienso aja'!, una mujer emprendedora del caribe, una red afrocolombiana de trabajo en Bogotá! El flyer es así: una imagen de una mujer totalmente desenfocada, con uniforme blanco, gorro blanco, casi tapada por las letras que anuncian las arepas (noto más tarde que este post no tiene muchos "likes", ni comentarios de compra como otro)... Luego aparece otro mensaje que anuncia algo así como: ¿Quién quiere arepas de huevo para el lunes? Tampoco tiene mucha repercusión.

El mensaje que explota y que tiene infinitos comentarios y "likes" es el que tienen aquí de pantallazo. La mujer dice asociarse con su talentosa empleada de servicio para ofrecer a la venta las arepas que ésta realiza. Pone el nombre de su socia entre comillas como también en otro 'post' lo que hace es desenfocar la imagen de su rostro. Todo parece tan obvio pero nadie se indigna: un uso abusivo de la imagen de la trabajadora, la falsa empatía para fines particulares, el uso de la supuesta buena moral para las intenciones particulares de una clase acomodada... y no quiero ir más lejos, porque si esta increíble empresaria ofrece arepas los lunes tendrá a esta señora haciendo arepas los domingos, así que podemos estar hablando de una manera muy sútil de explotación.

• CONJURO#12: Que la arepas de huevo rebocen, tomen vida, ataquen y quemen las llagas de la infamia de tantas buenas señoras de la clase acomodada que se llenan la boca de valores como lealtad.